(244 palabras) Maxim Gorky escribió una historia autobiográfica sobre la vida de un niño Alyosha, medio huérfano. El héroe vive en un ambiente filisteo, cuya moral se puede llamar cruel. En este mundo difícil hay personas buenas y malas. Pero un lugar especial en el destino del niño está ocupado por su propia abuela Akulina Ivanovna. Ella le enseña al joven héroe importantes lecciones de vida.
La abuela tiene ojos grandes y una sonrisa brillante. Su discurso es suave, plegable, como una canción. Cuando Akulina Ivanovna está cerca, Alyosha siente alegría. Le encanta escuchar cuentos de hadas e historias del pasado, que en boca de su abuela también suenan como cuentos de hadas. La heroína sabe bailar: no solo repite movimientos mecánicamente, sino que cuenta una historia. Hay leyendas sobre la capacidad de la abuela para tejer encajes. Ella dominó esta habilidad en su infancia, cuando era necesario recaudar fondos para la comida. Hasta ahora, los residentes de la ciudad están recurriendo a Akulina Ivanovna por "buen trabajo". Como recuerda una anciana, esto la ayudó a sobrevivir a un período de falta de dinero: una vez que su esposo se negó a "alimentarla". Ella no se queja de la vida, aunque siempre ha sido difícil para ella: la pérdida de su padre, la actitud irrespetuosa de su esposo, la dependencia de él ... Pero la abuela sabe cómo aguantar: así el Señor legó. Akulina Ivanovna cree en Dios y le habla como persona.
La abuela tiene un carácter fuerte. Cuando ocurre un incendio, no pierde su presencia de espíritu, saca cosas del fuego y ayuda a organizar el proceso de extinción. Akulina Ivanovna no se arrepiente de sí misma, sino de otros: personas enfermas, esposas en disputa, niños pobres. Alguien de los vecinos la llama bendecida. ¿Pero no debería ser esa la persona que desinteresadamente ama? Quiero creer que Alyosha se volverá igual de amable, misericordioso, valiente y trabajador.