El coraje es imposible sin la fuerza interior, lo que refuerza la determinación de una persona de tomar riesgos. Las personas débiles no pueden atreverse a tomar un acto audaz, porque dudan hasta el final y dudan si vale la pena sin encontrar una respuesta. Por lo tanto, a menudo asociamos el coraje con la fortaleza.
El verdadero coraje fue descrito por Pushkin en la novela "La hija del capitán". Su héroe desinteresadamente murió, aunque solo fuera para cumplir con su deber y salvar a un ser querido. Peter no traiciona el juramento, incluso cuando se le amenaza con la ejecución. Sin embargo, tiene el coraje y la nobleza de rechazar la oferta de Pugachev. Si no fuera por la valiente intervención de Savelich, el orgulloso Grinev sería ejecutado. Luego, una vez más demuestra su coraje, salvando a Marya de las garras del traidor Schwabrin. Luego va en contra de la orden, en contra de todos, pero logra su objetivo: rescata a su amada niña. Nuevamente, se enfrenta a represalias y, sin embargo, no tiene miedo, pero sigue adelante. ¿Cómo es esto posible sin fuerza interior? De ninguna manera. Un hombre débil traicionaría su patria y su amor hace mucho tiempo, solo para salvar su vida.
En el poema de Twardowski "Vasily Terkin", en el capítulo "Cruzando", el héroe no tuvo miedo y se precipitó al agua helada para ayudar a su escuadrón. Nadó a través del río, arriesgándose a ser disparado por los enemigos. También podría ahogarse, contraer tétanos, neumonía u otra cosa. Sin embargo, Vasily no tenía miedo por sí mismo, sino por el resultado de la operación y el destino de su destacamento. El objetivo más alto le dio la fuerza para luchar contra los elementos y nadar hacia los suyos. Terkin completó su tarea y trajo información importante sobre el desembarco de las tropas soviéticas en la costa enemiga. Sin embargo, no estaba orgulloso, no importaba, sino que bromeaba con todas las alabanzas y pedía un vaso de alcohol en lugar del frotamiento requerido. Un débil se dolería y se rompería, pero no se metería en agua fría. Solo una persona fuerte es capaz de este acto.
Por lo tanto, la fuerza de la mente es inseparable del coraje, siempre se manifiestan juntos, ya que no puedes correr riesgos sin forzar tu voluntad y determinación. Pero la cobardía es precisamente la debilidad que alimenta los temores. Sin ella, las fobias y los miedos no se convertirán en una cobardía total.